Los niños en esta etapa se empiezan a apropiar más del lenguaje para expresar intereses, emociones e ideas, por eso incorporan a su lenguaje nuevas palabras y crean sus propias historias.
En esta etapa se les proponen actividades que promuevan la imaginación, la experimentación y la creatividad. Además, se le da un especial énfasis al juego y a la actividad motora para conocer el mundo por medio de los sentidos.